Llegan las vacaciones y es momento para mirar hacia atrás y hacia adelante. ¿Para qué ha servido el huerto? y ¿qué pasa ahora con el huerto?
La primera pregunta habría que hacérsela a todos los alumnos que han pasado por él, que han sido todos los del colegio, desde los de Infantil de 3 años hasta los de 6º, y encontraríamos respuestas muy diversas. Yo me conformo con que todos los alumnos han tenido la oportunidad de conocer y experimentar todo lo que ocurre en torno a un huerto: han sembrado, observado el crecimiento, trasplantado, olido las plantas aromáticas, admirado las flores, recogido los frutos, observado los insectos y pájaros...
Luego, para cada uno habrá significado una cosa distinta.
Llega el verano, ¿y ahora qué?
Y luego, la pregunta que a muchos desanima a la hora de implicarse en un huerto, ¿y luego en verano que?
Si se ha dejado bien planificado, el huerto puede sobrevivir perfectamente al verano y luego estar a pleno rendimiento en septiembre.
una mariposa (cardera) en la lavanda
Hay que tener en cuenta que el huerto debe dejarse preparado para la circunstancia de que nadie pueda atenderlo durante los meses de vacaciones, aunque luego es probable que alguien pueda ahacer alguna cosa de vez en cuando.
Los cuidados que un huerto necesita son:
pimientos
tomateras
berza de León
Riego: con un sistema de riego por goteo con programador esta totalmente garantizada la supervivencia del huerto durante el verano, lo que hay que tener en cuenta es dejar bien ajustado el riego a finales de junio, observando que cada planta reciba el agua necesaria, teniendo en cuenta que alguna planta siempre morirá, pero el huerto en su conjunto saldrá indemne, así lo he podido experimentar varios años..
Limpieza: haber colocado malla antihierba en algunas zonas, mantener la hierba controlada, y el sistema de riego por goteo ayudan a que aunque crezca algo de hierba, no ahogue a las plantas del huerto
Otros cuidados: Colocar malla antipájaros ayuda a proteger las verduras de hoja y grano, la variedad de plantas y el equilibrio de insectos y pájaros ayuda a que las plagas no ataquen gravemente al huerto. Si están bien ordenadas las plantas es fácil que se mantengan bien.
otra mariposa (macaón) en la lavanda
Por mi experiencia de varios años, tomando las precauciones oportunas, el huerto sobrevive perfectamente al verano y septiembre y octubre se convierten en dos meses ideales para visitar el huerto con los alumnos.
puerros
cilantro en flor
En los veranos yo me acerco al huerto a hacer una visita de vez en cuando, cada semana o quince días, limpio un poco, recojo algunos frutos, ayudo con algo de riego alguna planta que haya sufrido sequía, recorto algunas plantas, sobre todo tomateras, y eso es suficiente. Lógicamente, cuanto más se atiende, más frutos da, pero sin ser despreciables, la cantidad y tamaño de los frutos no es el objetivo prioritario del huerto escolar.
Así van las plantas
lombarda sobre malla
calabazas sobre malla
La plantación sobre malla está resultando un éxito, al ser una zona a la que le dedicamos menos atención, la malla está resultando muy útil para que no crezcan muchas hierbas y para evitar la evaporación excesiva del agua de riego. Las lombardas, repollos, coliflores, brécol, calabazas y tomateras que hemos colocado están creciendo bien. Si observo que la cercanía de una falsa acacia hace que el pulgón sea más abundante. Empleando el jabón de potasa dos veces por semana, estamos recuperando las plantas atacadas.
El detalle de cómo va cada planta y su evolución durante el verano y cual es la previsión para septiembre lo iré detallando en la siguiente entrada.
Se acerca final de curso, el huerto está esplendoroso, muchas flores y los primeros frutos, comienza el calor de verdad, y ahora muchos se preguntan, ¿y ahora en vacaciones qué pasa con el huerto?, cuando parece que está en lo mejor, llegan las vacaciones y ¿se pierde todo? La respuesta es clara y rotunda, el trabajo, el aprendizaje y el resultado no se pierde. Pero voy a dejar para la siguiente entrada el planteamiento del huerto de cara al verano, ya que hoy quiero mostrar cómo está el huerto y las últimas actividades que hemos hecho en él.
Tino, ¡así va el huerto!
Tino está pasando unos días en León y a través del blog puede ver como va el huerto. "Lo cuido lo mejor que puedo".
El maíz y los girasoles están enormes y se van formando las flores. Los calabacines y pepinos están llenos de flores y dando frutos. Las tomateras están llenas de flores y ya verdean algunos tomates. Lechugas y endivias crecen a buen ritmo, de las acelgas vamos recortando hojas; los melones, sandías y calabazas crecen bien; las cebollas y los puerros van engordando; de los rabanitos vamos sacando de vez en cuando, zanahorias y remolacha van engordando, todas las coles van creciendo bastante; los pimientos y berenjenas todavía están pequeños; de las patatas ya hemos sacado alguna, las fresas están volviendo a florecer; todas las plantas culinarias y aromáticas están florecidas y plenas de olores; las flores se van abriendo y adornando el huerto: zinnias, dalias, tagetes, crisantemos, pensamientos, petunias, claveles, rosas, prímulas, caléndulas, margaritas... El pulgón, que apareció con el calor y las hormigas, lo hemos controlado bien con el jabón de potasa; después de rociar las plantas (tomateras, calabazas, acelgas y coles) tres veces a lo largo de una semana, ha desaparecido. El riego está siendo adecuado y la hierba que va saliendo después de tantas lluvias la vamos limpiando poco a poco, la malla antihierba nos ha ayudado mucho a tener limpio y transitable por todos.
. Diversas actividades
Después de hacer el jabón y las labores tradicionales del campo, hemos hecho papel reciclado y hemos puesto unas patatas a asar en la cocina solar.
En la zona del huerto solar, junto a la placa solar, están colocadas dos cocinas solares que fabricamos hace tres años. En el interior, en una rustidera, hemos colocado unas patatas pequeñas envueltas en papel de aluminio, las dejaremos haciéndose hasta mañana (por la tarde no tenemos clase), en la otra cocina, dentro de una tartera, hemos colocado tres manzanas. mañana comprobaremos el funcionamiento de las cocinas solares.
La cebada ya amarillea, por lo que hemos aprovechado para recordar las labores tradicionales del campo, antes de que llegaran las cosechadoras y en un día hicieran el trabajo que varias personas realizaban durante varios días.
Primero hemos segado, lógicamente lo hemos hecho con la mano, aunque les he enseñado una hoz y les he mostrado cómo se utilizaba. A continuación hemos amontonado en un rincón del huerto la paja y las espigas las hemos llevado a una era (zona embaldosada del patio) y hemos formado la parva, extendiéndola en un círculo para la trilla.
la parva en la era
trillando con los pies
Como trillo hemos utilizado la suela de las zapatillas (en clase les dibujé y les expliqué como se construía un trillo), en pequeños grupos, arrastrando las zapatillas hemos desgranado las espigas. A continuación lo hemos amontonado, listo para aventar, lanzando las espigas troceadas al aire para que el viento arrastre la paja y el grano vuelva a caer. Al final, con una criba tendríamos que terminar de separar el grano de la paja, pero no disponemos de criba les he mostrado cómo se haría con una rejilla.
Ya tenemos el grano listo para molerlo y hacer harina, pero eso es tarea para otro día.
El jabón sigue asentándose, y ya puedo afirmar definitivamente que la segunda fórmula empleada ha dado mejores resulyados. Repito la fórmula: 1 litro de aceite, 380 ml de agua y 158 gr de sosa cáustica. Diluir la sosa en el agua, esperar a que la mezcla se enfríe y verter poco a poco el aceite, removiendo durante al menos media hora en la misma dirección, hasta que espese la mezcla y dejar reposar.
Una de las actividades que hacemos en torno al huerto cada año es el jabón natural a partir de aceite reciclado.
mezcla de sosa en agua
Siempre había hecho el jabón con una receta aprendida hace años: 5 litros de agua, 5 litros de aceite y 1 kilo de sosa cáustica; sin embargo este año he descubierto otra receta: 1 litro de aceite, 380 ml de agua y 136 gr de sosa cáustica. Ante la duda de cual es la más adecuada, he optado por hacer las dos.
el jabón a los 4 días
Primero recogimos flores de lavanda en el huerto para aromatizar el jabón; a continuación, en un espacio abierto, con los niños sentados y un poco retirados, fui echando la sosa cáustica en el agua, removiendo con cuidado para que no se produjeran salpicaduras, pues la sosa es corrosiva. Al mezclarse se produce una reacción que desprende calor, por lo que hay que dejar que se enfríe. Trasladamos los recipientes al laboratorio.
jabón primera fórmula
trozos de jabón
. Al día siguiente, en el laboratorio, desgranamos las flores de lavanda y las echamos en el agua para aromatizar algo el jabón, a continuación, fuimos mezclando el aceite, vertiéndolo poco a poco a la vez que removíamos la mezcla siempre en la misma dirección. Así, durante más de media hora, hasta que adquirió una consistencia pastosa. Vertimos en un molde (una bandeja de galletas surtidas) parte de la pasta de jabón para hacer pastillas pequeñas con formas, el resto se quedó en los recipientes. El jabón se deja reposar hasta que adquiere la consistencia y el color adecuado. Hoy lunes, cuatro días después, hemos ido a ver como va el jabón, y he sacado un trozo de cada uno de los recipientes. Parece que la segunda mezcla tiene mejor color y consistencia. De todas maneras, todavía debe reposar al menos dos semanas.
tomateras con pulgón
Por otra parte, las tomateras y las calabazas han mejorado bastante y el pulgón casi ha desaparecido; como hoy ha llovido, no se pueden rociar las plantas con jabón de potasa. Mañana completaremos la limpieza de las plantas.
Como llevamos varios días sin lluvia y al mediodía calienta el sol, han vuelto a aparecer los pulgones. En el huerto han atacado a una fila de tomateras y hay algo en las coles, pero donde más daño están haciendo es en las calabazas que pusimos sobre malla en el jardín de los números, en los alrededores de una robinia (falsa acacia), seis plantas de calabaza están bastante afectadas, y dos de ellas, completamente llenas de pulgón. Como los brotes nuevos de la robinia parece que atraen a los pulgones, hemos podado todas las ramas bajas, hasta casi tres metros de altura, dejando dos ramas principales que creces verticales. Para intentar recuperar lo que se pueda de las calabazas, hemos fumigado bien con jabón de potasa, el lunes tendremos que repetir.
pulgon en la calabaza
pulgón en la calabaza
En las tomateras no había mucho pulgón, y una rociada de jabón de potasa lo dejará limpio.
robinia con pulgón
pulgón en la tomatera
Por lo demás, las flores siguen abriéndose, la cebada ya la estamos "cosechando", el girasol y el maíz crecen a un ritmo espectacular, las tomateras, pepinos (muy de moda últimamente)y calabacines se llenan de flores.
fumigando con jabón de potasa
jabón de potasa
flor de la cebolla
arbol de los farolillos
vista del huerto
cosechando cebada
los girasoles en primer plano
cebada y vista general
A primera hora acuden los pájaros a beber al estanque, esta mañana he podido ver las verdecillas que anidan cerca bebiendo agua, mirlos, palomas, lavanderas y gorriones son visitantes habituales.
Hay que tener en cuenta que el huerto debe dejarse preparado para la circunstancia de que nadie pueda atenderlo durante los meses de vacaciones, aunque luego es probable que alguien pueda ahacer alguna cosa de vez en cuando.
